Evelyn nunca quiso salvar al despiadado alfa, Dominic, pero ahora es su pareja. Ella no tiene lobo y ya ha elegido a Harrison, pero Dominic no acepta un no por respuesta. Él la secuestra, reclamándola como suya. Ella intenta escapar, pero cuanto más se resiste, más ardiente se vuelve el deseo entre ellos. ¿Qué es lo que más la aterra? La forma en que, lentamente, empieza a desearlo... más que a nada.